El Agua de Avène es un agua termal natural, de origen profundo y composición constante. Después de un largo recorrido, emerge limpia y pura, para ser captada y encaminada hacia la Estación Termal y la Unidad de Producción donde se fabrican los productos de los Laboratorios Dermatológicos Avène.
Las investigaciones efectuadas desde hace más de 30 años, así como los numerosos trabajos clínicos, permiten aún hoy seguir profundizando en el conocimiento del Agua Termal de Avène, un agua singular por:
Su patrimonio mineral: Debe sus propiedades a una composición única y original. De baja mineralización y con un pH neutro, presenta un equilibrio iónico bicarbonatado, cálcico y magnésico, y contiene además una gran riqueza de oligoelementos beneficiosos para la piel.
Su patrimonio biológico: Tras más de 12 años de trabajo, los investigadores de los centros de investigación Pierre Fabre han logrado aislar, identificar y caracterizar* una microflora presente en el Agua Termal, que han denominado aqua. dolomiae**. Esta microflora elabora unas sustancias activas a las que se debe en parte la eficacia del Agua Termal de Avène.
* Descubrimiento registrado en el Instituto Pasteur.
** En homenaje a Déodat Dieudonné Sylvain Guy Tancrède Gratet de Dolomieu, un eminente geólogo y mineralogista francés que descubrió las «dolomitas», unas rocas singulares que son la cuna del Agua Termal de Avène.
Pierre Fabre es el 2.º laboratorio dermocosmético a nivel mundial y el 2.º grupo farmacéutico privado francés. En 2016, sus ingresos alcanzaron 2282 millones, el 60 % de ellos obtenidos a nivel internacional y el
57 % por la actividad dermocosmética. Implantada desde siempre en la región de Occitania, Pierre Fabre dispone de filiales y oficinas en 47 países y distribuye sus productos en más de 130 países.
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